En varias ocasiones hemos hablado sobre qué es una APi y para qué sirve. Como ya sabemos, las APIs son interfaces que permiten el tránsito de información entre softwares o aplicaciones, de manera que se puede mejorar la experiencia de usuario.
Nuestro Director de la Especialidad de Backend, Hector Ferraro, asegura:
Cualquier cosa que se hace en la vida diaria de alguna manera está interactuando con las APIs. Acciones sencillas y cotidianas como iniciar sesión, escribir un comentario, hacer un posteo, prender el TV a través de Alexa o pedirle la temperatura del día a “OK Google” tienen API.
Por ese se ha vuelto imprescindible para las empresas la integración de servicios a través de las APIs; porque pueden ayudar a crear nuevas oportunidades de negocio, facilitar la Interoperabilidad y aumentar la rentabilidad de la empresa.
Pero, en estos momentos seremos más específicos y responderemos la gran interrogante de hoy: Cómo ayudan las APIS a tu negocio?
Cómo ayudan las APIs a tu negocio
Existen mil maneras en que las APIs pueden ayudar no solo en la rentabilidad de tu negocio, sino también en la experiencia que le brindas al usuario.
Algunos de los beneficios de las APIs para tu empresa son:
- Permiten “reutilizar” interfaces o módulos, lo que hace que el proceso de desarrollo sea más sencillo.
- Ya que el proceso de desarrollo se hace má fácil, es posible generar nuevos productos y servicios en menor tiempo.
- Se automatizan los procesos, lo que ayuda a ahorrar tiempo y dinero.
- Ayudan a que las empresas se integren y formen lazos colaborativos en pro del usuario.
- Pueden ser monetizadas, por lo que se podría cobrar por el uso de uno o más servicios.
- Garantizan el desarrollo de forma segura
Las APIs están pensadas para comunicar máquinas, no personas. Nosotros interactuamos con esas máquinas como apps, interfaces conversacionales y cualquiera que hace que nuestro día a día sea más sencillo, puntualizó Ferraro.
Este es uno de los puntos centrales de las APIs: mejorar, o crear, productos y servicios que se le ofrecen al cliente y, por ende, hacer su vida más sencilla.